miércoles, 26 de marzo de 2014

Día Internacional del Teatro 2014

Donde quiera que haya sociedad humana, el irreprimible Espíritu de la Representación se manifiesta.

Bajo los árboles de pequeñas aldeas y sobre sofisticados escenarios en grandes metrópolis; en salones de actos de colegios y en campos y en templos; en suburbios, en plazas públicas, en centros cívicos y en los subsuelos de las ciudades, la gente se reúne en comunión en torno a los efímeros mundos teatrales que creamos para expresar nuestra complejidad humana, nuestra diversidad, nuestra vulnerabilidad, en carne y hueso, aliento y voz.

Nos reunimos para llorar y para recordar; para reír y contemplar; para aprender, afirmar e imaginar. Para maravillarnos ante la destreza técnica, y para encarnar dioses. Para dejarnos sin respiración ante nuestra capacidad de belleza, compasión y monstruosidad. Vamos para llenarnos de energía y poder. Para celebrar la riqueza de nuestras diferentes culturas, y para hacer desaparecer las barreras que nos dividen.

Donde quiera que haya sociedad humana, el irreprimible Espíritu de la Representación se manifiesta. Nacido de la comunidad, lleva puestas las máscaras y vestimentas de nuestras distintas tradiciones. Utiliza nuestras lenguas, ritmos y gestos, y abre un espacio entre nosotros.

Y nosotros, los artistas que trabajamos con este antiguo espíritu, nos sentimos impulsados a canalizarlo a través de nuestros corazones, nuestras ideas y nuestros cuerpos para revelar nuestras realidades en toda su cotidianeidad y su rutilante misterio.

Pero en esta época en la que tantos millones de personas luchan por sobrevivir, sufren bajo regímenes opresivos y el capitalismo depredador, huyen del conflicto y la escasez; en la que nuestra privacidad es invadida por servicios secretos y nuestras palabras censuradas por gobiernos intrusivos; en la que se aniquilan los bosques, se exterminan especies y se envenenan los océanos: ¿Qué nos sentimos impulsados a revelar?

En este mundo de poder desigual, en el que distintos órdenes hegemónicos intentan convencernos de que una nación, una raza, un género, una preferencia sexual, una religión, una ideología, un marco cultural es superior al resto, ¿se puede realmente defender la idea de que las artes deberían apartarse de las agendas sociales?

Nosotros, los artistas de escenarios y ágoras, ¿nos conformamos con las demandas asépticas del mercado, o utilizamos el poder que tenemos: para abrir un espacio en los corazones y las mentes de la sociedad, para reunir gente a nuestro alrededor, para inspirar, maravillar e informar, y para crear un mundo de esperanza y colaboración sincera?”

Mensaje de Brett Bailey
Dramaturgo sudafricano, diseñador y director.
Traducción: Fernando Bercebal


martes, 18 de marzo de 2014

¿Por cuál vía seguimos ahora?

Hoy martes 18 de marzo, llevamos cuarenta días encerrados en nuestras casas por causa de una manifestación, que aun después de tanto tiempo me resulta ilógico pensar que llegará a una conclusión.

La triste noticia del pasado martes 11 de marzo, fue el vil asesinato del joven Daniel Tinoco, estudiante de nuestra UNET, que respiraba aires de frescura y de ilusiones para muchos de sus allegados. Igual como todos los jóvenes de nuestras casas de estudio que son víctimas de un movimiento político, y que a fin de cuentas lo único que ha despertado es la violencia de la que no sabemos hacia donde nos llevarán con tanto odio, guerra y destrucción. Lamento profundamente este deceso, que no trae ninguna respuesta coherente.
Bajo ninguna circunstancia me someteré a la violencia que nos rodea, de esta irracional forma de encarar nuestros problemas, pero debemos pensar que es una situación compleja en la que se han salido de sus cabales quienes están al frente.

En primera instancia los líderes opositores, se apoyan en la euforia de los estudiantes para lograr sus cometidos, pero mi pregunta es: ¿Dónde estaban estos líderes cuando los jóvenes fueron atacados? ¿Dónde está el compromiso de vigilancia y de seguridad que debe prestar la municipalidad?, porque hasta donde sé estos jóvenes están amparados en su nuevo ALCALDE. El problema, es muy fácil llevar a las personas a un matadero sin tregua para después ocultarse en la careta de LIBERTAD, que tanto se habla pero que nadie es capaz de hacer una propuesta seria y decidida.

El GOBIERNO REGIONAL: ¿es incapaz de maniobrar en contra de estos hechos? entonces estamos a la deriva en el caos de ingobernabilidad, donde quedamos a expensas de una hecatombe. Es muy fácil señalar que hay un grupo armado de delincuentes, que son los mismos que nos colocan un toque de queda en horas de la noche, pero igualmente durante el día somos asediados por motorizados y personas sin escrúpulos que delinquen sin parámetros y sin mesura. Este lado del conflicto está más dentro de la inoperancia de los cuerpos de seguridad (PNB, GNB, Politáchira, Policía Municipal), que de civiles que se defienden por todos los Medios.

Veo un estado de irresponsables, que sólo se entregan a luchas estériles, mezquinas y desérticas sin discurso, sin lógica, solamente por un problema político que nos lleva a un abismo sin fondo. Es posible que estemos jugando a esta polifonía inquietante para que los verdaderos venezolanos que están(mos) tratando de sobrevivir, no nos enteremos de los conflictos económicos, de seguridad y salud que tenemos sin vuelta atrás. Una orquestación en la que todos somos parte del libreto que ya fue predeterminado desde antes de la protesta la última semana de enero. Somos participes del problema que se extiende como la pólvora y no hay llegadero posible o salida viable.

El GOBIERNO NACIONAL se refugia en la CONFERENCIA POR LA PAZ en la que los opositores no quieren asistir, entonces en qué quedamos, ¿queremos tranquilizar el país?, sentémonos a cómo dé lugar a hablar de soluciones inmediatas, y de la recuperación del ánimo en el que todos trabajamos en conjunto, y sobretodo en el rescate de la ciudad de San Cristóbal que ahora sí parece un gran vertedero de basura –que yo he denunciado y remarcado desde esta columna por años- y de un panorama que no podremos levantar en muchísimos años, porque los daños son irreversibles.

Por otra parte, los ESTUDIANTES deben bajar la guardia en estas protestas tan violentas que han paralizado el estado en un alto porcentaje, ¿será posible que entremos en armonía y diálogo al menos una vez en mucho tiempo? Me parece, que NO, porque hay un odio infundado que no tiene comparación con otros tiempos, hay una alienación de jóvenes hacia un discurso de choque, un enfrentamiento sin sentido, me duele ver esta reacción y qué viene ahora ¿Cuál es la vía que se debe tomar ahora?

Una vía en la que hay que ser muy inteligentes y bajar el tono de los discursos, tanto del ALCALDE, como del GOBERNADOR y de los ESTUDIANTES, para buscar una lógica y poder hablar de PAZ.

¿Realmente quieren PAZ? No derramemos más sangre, hoy estoy muy afligido por la muerte de este joven estudiante de la UNET, no puedo dejar de pensar en los planes, proyectos y aspiraciones que quedaron a la deriva en la mitad de una calle por una bala que atravesó en medio de la noche sin responsabilidad alguna. NO este no es momento para enfrentar, este es el momento de reaccionar y dialogar.

¡Que ningún joven vuelva a caer!