viernes, 30 de marzo de 2012

Una Tregua…


La dramaturgia es uno de los géneros de la literatura que ha recibido la mayor parte de los rechazos por parte de la crítica académica, porque se considera un hecho artístico teatral más complejo, lo que la ha llevado a limitarse en muchas editoriales. Hace unos días me topé con el trabajo Los Girasoles no florecen en invierno y otras piezas teatrales de Carlos Dimeo (gran amigo) publicado por la editorial el Perro y la Rana y me parece que se hace justicia a un género literario que podemos disfrutar como lectores ansiosos de explorar nuevas poéticas. Esta publicación de Carlos Dimeo está marcada por una fuerte influencia de la literatura del absurdo, que se deja entrever por ritmos y situaciones bastante curiosas que alimentan la narración de la historia.

El trabajo contiene tres piezas que resultan un desafío para quienes pretendan acercarse a su puesta en escena debido a la complejidad de imágenes, es por esto que considero que los dramaturgos son poetas que luchan con la palabra, resultando un discurso complejo y atractivo.

La primera de las piezas La Tregua, un nombre bastante contradictorio para su relato, es un trabajo de una persona que simplemente oye el conflicto de pareja de los vecinos. Encontramos que el discurso se basa en la reacción inmediata de quien escucha, es un trabajo totalmente auditivo y tiene una suerte de voyerista, es el juego de percibir al Otro sin la idea que se le perciba a sí mismo, se recrea en una serie de reacciones que juegan al humor negro del personaje testigo de una acción muy violenta, que simplemente se queda allí, en estado de shock, y no puede detener su curiosidad. Para quienes lo lean de seguro entrarán en conflicto sobre su final.

Los asesinos, siguiente pieza, basada en el cuento homónimo de Charles Bukowski, se deja abrir en un horizonte de incoherencias, donde los detalles se van dejando observar y procuran sean los planos principales del relato, es comprensible la influencia que Carlos tiene al tratar de buscar los mínimos elementos para convertirlos en la sensación del relato. Podemos hablar de una dramaturgia que entra en sintonía con lo surrealista, pero que se divierte en una relectura de un estilo que se ve cargado de ritmos de jazz y concluye en una torpeza adrede por la forma que se desarrolla el texto, puesto que al hacerlo, el autor empieza a experimentar la posibilidades de un discurso que se cuestiona a sí mismo. Los Asesinos son una serie de imágenes que quieren dejarse atrapar, pero huyen de inmediato dejando la sensación de una literatura no edificante que se yergue en cada una de las frases y situaciones de sus protagonistas, para desencadenar un final tan absurdo como toda la pieza, dejando que el lector se divierta y de manera muy delicada, el autor lo lleva a terrenos en los que demuestra dominio del humor que está presente de manera perenne en su producción.

Una última pieza es Los Girasoles no florecen en Invierno, que trata de acercarse a un conflicto filosófico tratado por otros autores y que es punto crucial en algunas poéticas como por ejemplo La hija de Rapaccini de Octavio paz o el Fausto de Goethe, en la que encontramos la manipulación del tiempo en medio de un amor imposible que trata de sobrevivir entre un maestro y su estudiante que inventan un  mundo en el que ellos realmente no existen, donde están aislados de la cotidianidad y entran en la intriga del amor que nunca se conjugará por razones obvias, de las cuales el autor procura que sea más sobria que las otras dos piezas. En cuanto a ritmos y temáticas se entra en la psiquis de sus personajes y los hace dialogar en un conflicto que, intensamente tratan de luchar por sus destinos. Es un muy buena alternativa para estudiar la manera de jugar con el tiempo detenido, las medias luces, las imágenes de situaciones interminables y una serie de detalles a los que Carlos recurre para engañar al lector, que seguramente estará cerrando las posibilidades de miles de caminos para llegar a un final, con un desenlace que es común en toda la publicación. Este juego de lo absurdo es una herramienta que el autor vienen trabajando con bastante hincapié y permite que su libertad creativa  sea más activa y pueda manipularla.

Es por eso que recomiendo la lectura de esta publicación de la dramaturgia venezolana que está siendo propuesta por Carlos Dimeo, un asiduo investigador del teatro latinoamericano y que hoy nos ofrece parte de su producción teatral.

Sólo me resta decir lo mismo que se me ocurre cada vez que leo o encuentro algo tan llamativo: “El arte es un peligro para la ignorancia”.

martes, 27 de marzo de 2012

Mensaje Día Internacional del Teatro 2012

 El Instituto Internacional del Teatro-ITI de la UNESCO me ha honrado con su petición de realizar este mensaje en la conmemoración del 50 aniversario del Día Mundial del Teatro. Voy a dirigir estas breves consideraciones a mis compañeros del teatro, mis pares y camaradas.
Que vuestro trabajo sea convincente y original. Que sea profundo, conmovedor, reflexivo y único. Que nos ayude a reflejar la cuestión de lo que significa ser humano y que dicho reflejo sea guiado por el corazón, la sinceridad, el candor y la gracia. Que superéis la adversidad, la censura, la pobreza y el nihilismo, algo a lo que, ciertamente, muchos de vosotros estaréis obligados a afrontar. Que seáis bendecidos con el talento y el rigor necesarios para enseñarnos cómo late el corazón humano en toda su complejidad, así como con la humildad y curiosidad necesarias para hacer de ello la obra de vuestra vida. Y que sea lo mejor de vosotros - ya que será lo mejor de vosotros, y aun así, se dará sólo en los momentos más singulares y breves - lo que consiga enmarcar esa que es la pregunta más básica de todas: “¿Cómo vivimos?” ¡Buena Suerte! 

John Malkovich.

miércoles, 21 de marzo de 2012

¡Conectadísimo de nuevo!!!

CANTIDAD y mayor CALIDAD es lo que podemos ver en los grupos que estarán presentando sus trabajos este fin de semana en Conéctate y Convive en la Frontera 2012 que es organizado por la Universidad Católica de Táchira, teniendo al frente como coordinador al padre Dizzi Perales, en conjunto con su equipo de trabajo que está empujando fuertemente desde hace unos meses para llegar a la tercera edición, que logra congregar a más de quinientos artistas en tres días.

Esta idea es una de las muchas que están surgiendo en nuestra región, permitiendo ver un espacio mancomunado de las artes que se abren paso en medio de una selva de cemento y de rutinas que consumen a todos nuestros habitantes, pero que, finalmente estamos viendo posibilidades de un lenguaje artístico y popular muy propio.

Para entrar un poco en la dinámica de lo que estamos presenciando, podemos decir básicamente, que el formato de Conéctate y Convive ha logrado calar en la mayoría de los jóvenes debido a su forma de interpretación, cada grupo tiene un tiempo muy reducido para exponer su trabajo. Acá no vamos presenciar espectáculos concebidos para una duración mayor de veinte minutos, lo que impulsa a cada uno de los artistas a dejar gran cantidad de energía en cada performance que presenciamos. Es un formato muy acertado que entra en sintonía con el arte urbano que trata de mostrarse y que encuentra una extraordinaria oportunidad para exponerse. Estamos frente a un evento que respira por sí solo, que sintoniza con un público sediento de propuestas.

Era necesario este escenario, más informal, de formato más libre, para que los artistas noveles y no tan noveles se presten al desarrollo de sus ideas, y por supuesto, tengan la oportunidad, que de seguro muchos no están dispuestos a desperdiciar.

Conéctate y Convive es así, como su nombre lo indica, un salto vertiginoso en las profundidades de ideas libres que se desplazan unas al lado de otras, sin importar los límites de las disciplinas que allí se congregan en determinado espacio de tiempo. Es una posibilidad de echar un vistazo a la generación naciente de artistas de la región, que se proponen hacer un arte sin complicaciones, sin ataduras, más que las de impulsarse hacia adelante y dejar que toda la energía fluya en medio de un ambiente que realmente deja un halito de innovación. ¡Son artistas que están allí exponiendo su trabajo! y que no más que su apuesta por una estética que responda  las intríngulis que nos deja la ciudad

Es por esta razón que Conéctate y Convive sigue viviendo, con la finalidad de abrir el horizonte a más personas que no sólo presten sus ideas para reunirse y desarrollar la performance que le corresponde, sino que está cumpliendo con la función de formar un público que esté dispuesto a asistir activamente.

Conéctate y Convive ahora se desplaza hacia la frontera, permitiendo así el desarrollo de actividades en una región que está sedienta de actividades en este formato, para pacificar un poco los conflictos propios que nos entrecruzan diariamente y que para todos nos son comunes, es formidable esta movilización hacia el interior de nuestro estado.

Es un panorama que se vislumbra con un saldo a favor del arte, que está creciendo sin detener porque propician un espacio para compartir, divertirse y sobretodo intercambiar entre cada uno de los hacedores de la cultura en nuestro estado. Es innegable que la cartelera cultural de la ciudad está cada día más intensa y las funciones se multiplican al igual que crece nuestro entorno, espero estas alternativas no se pierdan y por el contrario se extiendan a otras partes con el pasar los días.

Viendo este panorama cada día reafirmo más: EL ARTE ES UN PELIGRO PARA LA IGNORANCIA… y a CONECTARNOS!!!!

domingo, 4 de marzo de 2012

La Sombra del Bufón

Actualmente podemos ver cómo se tratan de remasterizar cantidad de temas que en su momento fueron éxitos, lo mismo ocurre en las adyacencias de muestro entorno. Desde hace unos años viene gestándose el trabajo re-estudiado de Guerra Santa, la banda de SC que este año llega sus dos décadas de trabajo continuo y que ha logrado un espacio dentro de la escena metalera venezolana.

La Sombra del Bufón es un trabajo que intenta reconstruir el imaginario de una época, de recuerdos que aun no terminan de desdibujarse, pues se ha realizado una recopilación con nuevos arreglos y formas de percibir la música de otra manera.

La banda como tal, después de tantos años, se ha tomado el tiempo necesario para arrancar con un aire de renovación en sus reef y en sus arreglos, para dejar fluir la energía que tanto se necesita. Guerra Santa trata de mantenerse en pie con composiciones que rayan en sus clásicos, de una poética que intentó implantar y que dio sus frutos en cierto tiempo, pero ahora, con este impulso se encamina una vez mas a una exploración dentro del difícil género del heavy metal.

Es claro que este es un género bastante complejo en cuanto a la composición, arreglo musical y la interpretación vocal, pero Guerra Santa ha llegado a desarrollar un estilo que lo caracteriza, porque lo ha adaptado a sus formas de interpretación, para dejar ver su propuesta una y otra vez dentro de un auditorio que lo ha seguido por tantos años.

En esta ocasión  nos enfrentamos de nuevo a temas como Hechizo, Solo, Naufrago, Escupe Fuego, Recuerdo Maldito, Guerrero de la Luz, Hijos de Dios y el clásico Arlequín, que muestran a grosso modo, el trabajo que desarrollan y es parte de una forma de existir y de ver el universo del rock.

La Sombra del Bufón es un trabajo muy completo, con guitarras que se sincronizan y realizan una armonía bastante interesante puesto que entran en el mundo de esta cadencia de Guerra Santa que siempre se inclina hacia contar historias de amor, de locura y de ficción. De una temática que está allí, tratando de abrirse paso en medio de la voz  de Marino  Vasquez que oscuramente se traza como un hilo de contrastes, para desarrollar una estética agresiva pero sublime al unísono. No podemos olvidar los pilares fundamentales de las guitarras que se ven influenciadas por un heavy metal de finales de los ochentas y principios de los noventa, con un sonido muy avanzado de la primera década del siglo XXI, lo que las hace entrar en una controvertida de sonido que acaricia lo áspero. Con la interpretación certera de Daniel y Oswaldo (Maracucho) que se entrelazan en los solos y las introducciones con arpegios que no paran en ningún momento desde el inicio del primer tema.

Nos encontramos frente a una formación de músicos con experiencia en el género desde el bajista Alejandro Ardila, pasando por las guitarras y descansando en la batería de Diego López, que al ensamblar dicho trabajo, deja como resultado la huella de tránsito que ya es común y que se convierte en un estilo que tienen su propia identidad.

Guerra Santa transita de nuevo en una propuesta de mezclar, de reeditar sus éxitos y de buscar nueva formas de interacción con un público que ha menguado dentro de este estilo, pero no hay problema, puesto que es una poética que se abre paso a través del tiempo y que busca entrar en sintonía con muchos circuitos que están desarrollándose en diferentes espacios, festivales y enlaces. El heavy metal es un género que muchos pensaron había desaparecido hacía más de una década, pero allí se mantiene y Guerra Santa es un ejemplo de una banda que se mantiene en pie desarrollando sus acordes de un  bufón que se niega a la muerte y que a cada paso puede mostrar que aun resiste y tiene vida.

Muy importante que podamos disfrutar de estos temas, y que una vez más se escuche "Arlequín" que es el emblema de Guerra Santa, tratando de aparecer como un fantasma que navega entre las olas del olvido y que de nuevo está allí, en una metamorfosis de Bufón que impone de nuevo la fuerza de los acordes y de la lírica agresiva para prevalecer en el tiempo.

Un trabajo para los rockeros de más experiencia, y para los más jóvenes les recomiendo lo revisen, que de seguro encontraran parte de esta historia del rock en la región que se ha perdido y que ahora tratamos de rescatar.

Por eso recomiendo la Sombra del Bufón y lo pueden descargar desde www.myspace.com/guerrasantaoficial.

Una vez más vemos que es necesario difundir este tipo de trabajo y no se les olvide: El Arte es un peligro para la ignorancia.