jueves, 28 de enero de 2010

La Feria mas “grande” de América


Siempre he considerado que la feria es una excusa de los gochos capochos para poder tener una semana de abandono y de desidia, como efectivamente la estamos presenciando en esta ciudad que vivimos tantos y que le duele a pocos. Desde el principio de enero se olvidaron de los restos de la navidad que estaban por ahí, tratando de refugiarse en alguna familia y se mantuviera una tradición como la paradura del niño, o la preparación de comidas para el 02 de febrero. Pero la feria es un enorme monstruo comedor de fiestas familiares y celebraciones tradicionales, para ella transformarse en una gran tradición prosaica, sucia y marginal.


Los habitantes de esta ciudad están sólo supeditados a una gran rutina ferial que arranca con los juegos mecánicos que están frente a los pabellones, son maquinas tan obsoletas que me recuerdan a las fiestas que hacían en las películas mexicanas de los años 50, llenas de campesinos que se asustaban con la silla voladoras. Acá, estamos en la misma situación, la gente se sorprende por un aparato que le da vueltas por el aire, y una montaña rusa que por poco se desarma, pero tranquilos, súbanse ahí que en esta parte del mundo nunca se muere nadie en una maquina que fue colocada allí irresponsablemente.

Por otro, lado viene un desfile que da tanta lástima y es tan decadente, como las mismas candidatas que no se dan cuenta que es una feria… es decir…”FERIA”, no es un concurso de belleza de carácter mundial, es de una “FERIA”, y es tan parecido a la elección de la reina de la escuela donde estudié primaria. El desfile es decadente como sus candidatas y viceversa… es una lástima y perdida de tiempo.

Una más es el refamoso circuito de la vuelta ciclística más importante del mundo... -porque así le dicen- pregunto: si es tan refamosísimo ¿por qué no aparece en ESPN, FOX sport o cualquier otro canal aunque sea “nacional”, porque de esta competencia sabemos sólo lo que mediocremente transmite TRT. Ese circuito es la mejor oportunidad, para que una vez al año los gochos se detengan con sus supercarros a escuchar reggaeton por todo lo largo y ancho de la 19 abril, se emborrachen sin inhibiciones durante todo el día y parte de la noche, y al final nadie sabe quien ganó, cuántas vueltas dio, o si eso es una competencia deportiva…

Y por último –no me puedo retirar sin decir esto- se vienen la corridas de toros con carteles sólo superados por las Ventas de Madrid (sarcasmo). En una ciudad que no sabemos diferenciar un toro de un caballo ¿qué hace la gente allá? Además, considero que las corridas son un acto salvaje de barbarie, y la gente que va a estas actividades son tan enfermos por la tortura y el maltrato, como los nazis que idearon los campos de concentración y se divertían descuartizando cuerpos humanos… sí, hay que ser muy inconsciente para ir a la plaza de toros a ver torturar un animal… pero allí, de nuevo todos los gochos van vestidos de sombrero, camisa de cuadros, jean apretados y botas vaqueras, es como un estereotipo que todos se deben vestir así, cargan sus grandes vasos llenos de mil cosas para tratar de emborracharse lo más rápido posible y de la manera más barata. Y lo último que me falta, y que siempre me ha llamado la atención: los que suben a comprar ollas en la exposición de los pabellones… no entiendo cómo le hacen para andar de rumba con una olla mondonguera, es que en todo el año no la han podido comprar?

Pero no hay ninguna crítica a todo esto, de todas maneras es la Feria de San Sebastián y todos deben disfrutarla porque es la única oportunidad del año de poder ir al bacanal sin remordimientos, ni presiones…. La feria más “grande” de América … que la disfruten.

PD: ahí les dejo una foto de algun pincho que alguno de ustedes se comió....

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Una descripción ejemplar del lado oscuro de la feria “gigante” de América, sin embargo quiero agregar unos detalles que no mencionaste, por ejemplo el desfile de la Fiss, presentaron una temática de películas de cine comercial holliwondence, parece que el tema de los 29 municipios que configuran nuestro estado Táchira y representarlos por carrozas ya está trillado para los organizadores, así somos y les incomoda quizás, por qué no representaron las maravillas naturales y culturales de nuestro país Venezuela? Pero no la opción de las pelis fue la mejor alternativa, el año que viene quien sabe con qué tema banal y superfluo será el desfile.

La vuelta al Táchira en cicla, coincido completamente en su planteamiento a propósito de nivel de competición, pocos de equipos que vinieron a pasear y deleitarse con el entretenimiento adulto y drogas, de paso, que el comportamiento primitivo y chaborro de la gente, pues en el circuito, tirándoles cervezas y potes a los ciclistas justamente cuando hacen su llegada final a la meta.

Los parques mecánicos sin comentarios, pero ahora se le suman los castillos inflables, si! Casi una tragedia cuando en el barrio chino, uno de esos se desinfló y los niños cayeron golpeándose unos con otros en la cabeza y llorando y gritando por el susto, qué tal ? nueva modalidad de entretenimiento para niños de 2 a 4 años. Las corridas de toros y el coleo “deporte nacional” ciertamente además del morbo que presentan dichos espectáculos allí todos son ganaderos y vaqueros, con su vestimenta que los caracteriza por los lados de asogata, pero cuando salen de allí se convierten en vallenateros.

Pero bueno la Feria de San Sebastián con su slogan “Sientela” claro que la sentimos! siento ganas de vomitar con los olores fétidos característicos de un tumulto de gente pasando una tarde diferente, siento las miradas de los amigos de los ajeno pendiente del entuque, siento la música de moda este año que fue “la pulguita” ya pasó a segundo plano el zancudo loco y el minutero.

Sobre la gastronomía ya sabe… pinchos al dente.

Vanessa Nataly Castro Rondón dijo...

No es por ser fatalista pero vivimos en una total desidia. Da pena ver en lo que nos hemos convertido.
Y digo vemos porque todos a fin de cuenta somos "gochos"