Día Nacional del Teatro

Nuestro país tiene ciertas particularidades en materia de artes, casi siempre uno está en desacuerdo con las políticas aplicadas, porque están marcadas en enfoques prefabricados, que tienen como objetivo el desarrollo de gran cantidad de documentos y papeles que ayudan a aumentar la burocracia, y en el campo de las artes se ven afectadas por un deterioro y abandono de algunos gremios.


Para nosotros los teatreros, el teatro trata de mantenerse a flote pese a las adversidades y promesas gubernamentales que se hagan. Por ello, hoy quiero compartir estas palabras de estímulo y de apoyo a todos los que en este día se sienten parte de una manifestación humana tan compleja y tan prístina como lo es el teatro.

El teatro es una posibilidad histriónica, dejando esta estela de un conocimiento humano universal. También es la confabulación de casi todas las artes para que en este se aplique y se deje mostrar. También es la forma natural, idónea de mostrarnos a nosotros mismos, siendo este un arte que vive, porque sólo el teatro existe cuando el público asiste a la función de teatro, es ilógico pensar el teatro en video, para eso existen otras formas de expresión.

En el caso de Venezuela celebramos este día 28 de junio como una forma de representarnos y de mostrarnos una vez. En diferentes partes del país vemos que este día -o esta semana- hay un sinfín de muestras de teatro, porque para eso es que existen las agrupaciones y los montajes, para que se vean, para que el público se encargue de respirar el ambiente que allí se presenta, y para que podamos convivir un instante, pero tan sólo un instante de los personajes que allí de muestran, en esa fracción que inicia con la entrada del publico.

En nuestro estado, tenemos la particularidad de celebrar de manera aislada, quisiera que todos nos reuniéramos en un gran festejo, y esta semana seamos una fuente de creatividad escénica. Estoy seguro, y muy seguro de una posibilidad de hacerlo, sin tantas excusas de “presupuestos” y de “rencores” que entre todos existe, fruto parcelas inútiles y banales, de pensamientos obtusos que nos dejaron los personajes del pasado teatral reciente. Creo, deberíamos pasar esa página y realmente mantener un movimiento artístico, con una cartelera permanente, con funciones en diferentes horarios, con talleres y procesos de preparación que sean compartidos y con seminarios donde cada uno pueda aplicar sus experiencias y conocimiento sobre esta manifestación artística.

Creo que a eso es a lo que nos llama este arte tan complejo y tan constante, que se niega a morir, y que veo con excelente horizonte, donde el nacimiento de más agrupaciones se ve ineludible. Debemos ver el nacimiento de nuevos directores, actores y autores como la multiplicación de este oficio y no como el acrecentamiento de odios y envidias.

Por eso, mis amigos del teatro… para esta semana del 28 de junio, espero que podamos compartir estas líneas y sigamos tratando de mostrar las maravillas teatrales de las cuales somos dueños y promotores.

Para todos ustedes que tengan un Feliz Día y que el Teatro pueda crecer y extenderse a todos los rincones….

Salud!!!